Massive Caller rompe paradigmas: le han atinado a 14 de 15 elecciones

MÉRIDA.– Massive Caller no tiene a nadie indiferente en el país. Ha desatado la polémica por los resultados de sus encuestas —en la mayoría de los casos enfrentados a los de empresas “tradicionales”— y por el disruptivo método que utiliza, llamadas telefónicas hechas por robots, un sistema que incluso no reconoce el Instituto Nacional Electoral (INE).

“No tenemos contento a nadie”, comentó ayer José Carlos Campos Riojas, director general de la joven empresa, durante su participación en el VIII Foro del IMEF. “Los de Morena, porque dicen que no le damos un margen mayor en su ventaja a López Obrador: los del PAN, que hasta hace un mes nos aplaudían, porque mostramos un descenso en las preferencias por Ricardo Anaya, y los del PRI, porque mostramos el estancamiento de Meade”.

Tras presentar los resultados de sus más recientes estudios sobre las tendencias electorales en los otros siete estados que, como el nuestro, elegirán gobernador el 1 de julio próximo, Campos Riojas señaló que “en el caso de Yucatán está muy claro lo que va a hacer la población el día de las elecciones.

“El PAN va muy arriba en la intención de voto. Sé que hay encuestas locales que ponen un panorama diferente, pero bueno, esta es nuestra medición”, señaló en declaraciones a Diario de Yucatan.

Massive Caller, recordó su director general, nació hace tres años en Monterrey y debutó en el proceso electoral de 2016, cuando 12 entidades eligieron gobernador. Su “porcentaje de bateo”, como le llamó Francisco Alvarez, presidente local del IMEF, roza la perfección: 0.933, producto de 14 aciertos en 15 elecciones (se fue de 3-2 en 2017). “El año pasado acertamos en los resultados del Estado de México y Nayarit. En Coahuila estábamos bien mientras duró el PREP, pero se detuvo el conteo rápido a las 4 a.m. y el resultado cambió a favor del Revolucionario Institucional”.

Campos Riojas dijo también que realizan “encuestas de coyuntura” para varios partidos —no sólo para el PAN— al referirse a lo que dijo es una campaña de desacreditación en contra de su empresa, una guerra sucia en la que se incluye un video subido a redes sociales en el que se asegura que fueron “hackeados” y se les acusa de simular los resultados.

Luego de defender su método y decir que se le ataca porque usa un “modelo de negocios muy diferente”, basado también en la venta directa de sus estudios mediante una aplicación para teléfonos celulares, señaló que la verdad se conocerá el 1 de julio… “Todas las casas encuestadoras tenemos una cita. Se sabrá finalmente quién se equivocó o mintió y quién no”.