Vacacioniostas invadieron las playas de Progreso

Una cantidad exagerada de visitantes invadió las playas locales de esta ciudad y puerto, así como de las comisarías de Chicxulub, Chelem y Chuburná este Domingo de Resurrección, el tercer domingo de abril con quincena, en medio de calurosa jornada.
El número de visitantes fue tanto, que propició al máximo que elementos de la Policía Municipal Preventiva cerraran la calle del malecón debido a la gran afluencia de visitantes que se esparcieron a lo largo de la playa.
Este domingo, considerado como el más fuerte de la temporada de primavera, los visitantes disfrutaron la jornada, con fuerte calor de 38 grados a las 15 horas, en una jornada dominical con mucha venta de cerveza, inclusive de las marcas que instalaron dos tarimas para grupos musicales: una en el malecón tradicional y otra en el internacional.
Los visitantes, desde temprana hora abarrotaron las playas del malecón de la zona oriente y, desde luego, al llamado internacional acudieron numerosos visitantes.
Estuvieron en actitud de vigilancia, elementos de la Policía Municipal Preventiva y de la Secretaría de Seguridad Publica (SSP) y por el mar por el Remafe y la Semar.
Este domingo de vacaciones de primavera, en la zona de las playas de Progreso, de Chuburná a Uaymitún, se calculó que centenares de paseantes se concentraron unos en las costas de Progreso a Chicxulub y otras de distribuyeron a lo largo de la costa, la Policía Municipal de este puerto abrió un carril más para darle salida a los centenares de vehículos para el retorno a sus lugares de origen.
Fuentes policíacas dieron a conocer que la afluencia de visitantes a la playas yucatecas inició desde las 9 horas, con la llegada de vehículos al puerto con centenares de paseantes, entre éstas en automóviles, al igual que los de servicio público en el caso de los taxis colectivos y autobuses de la ruta Mérida – Progreso; definitivamente, este domingo fue uno de los días más concurridos en estas vacaciones de primavera.
Desde luego, no faltaron las sirenas que buscaron la oportunidad de mostrar sus esculturales cuerpos ante un sol que acariciaba sus pieles para darles el bronceado que buscaban.
Mario Canto Caballero, quien llegó de Tixkokob con su familia a disfrutar del mar, comentó que compró 2 kilos de pescado, cada uno a 180 pesos, agregó que donde los compró no había lista de precios debido a la oferta y la demanda, es decir, lo tomabas o lo dejabas.
“Llegamos en nuestra camioneta; otro problema que pasamos fue la falta de sanitarios, ya que si tomas tus cervezas, hace falta un lugar donde hacer las necesidades fisiológicas.
María Pech Kantún, vecina de Motul, dijo que llegó con su familia, que se cotizaron dos familias para venir a la playa, no alcanzamos pescado, compramos pollos asados, el pescado tuvo gran demanda, se hacía colas para comprarlo.
“Gastaremos cuando menos unos 2 mil pesos, somos 7 personas, entre gasolina, botanas y el pollo y, desde luego, las cervezas y refrescos, pero pasamos un momento feliz en la playa, tomaremos un par de cervezas menos mi hijo porque maneja”.
Oswaldo Canto Rojas, jefe de meseros de conocido restaurante del puerto, dijo que este domingo hubo gran demanda de mesas para ocupar en la avenida del malecón, donde nos preparamos para recibir a centenares de visitantes.
Desde las 12 horas y hasta las 4 de la tarde, el ir y venir de meseros era fuerte con botanas, comidas y cervezas, que fueron los que más solicitaron en este Domingo de Resurrección, desde luego que la cercanía de la quincena fue uno de los motivos de los visitantes a las playas.
En camiones y combis colectivas comenzaron a llegar paseantes del interior del estado, con mochilas y neveras para disfrutar de la playa, el Sol este domingo brilló en todo su esplendor, eran las 15 horas y la gente continuaba llegando a las costas desde la carretera Mérida-Progreso, donde había una fuerte carga vehicular constante, se observaron automóviles que llevaban más de 5 pasajeros, desde luego los paseantes decidieron disfrutar de la playa este domingo.
Desde la carretera se veía que habría un gran número de visitantes en Progreso, y se veían caras de felicidad, sobre todo de los niños al poner los pies en la arena, meterse al mar después correr, al igual que los adolescentes que jugaron una cascarita playera.
Restaurantes con mesas llenas, desde luego hubo buen movimiento de turismo local, muchos acudieron al mercado para degustar de un rico pescado frito, otros consumieron pollos asados, pizzas o simplemente fueron a tiendas de autoservicio, para pasar un momento agradable este domingo playero.