MÉXICO.– Gibrán Ramírez, quien contendió como aspirante a la presidencia nacional de Morena, afirmó que hubo “trampa” del Instituto Nacional Electoral (INE) en el proceso para conformar la encuesta final para la renovación de la dirigencia del partido y acusó que la burocracia de dicho instituto político decidió que no siguiera en la pelea porque “tuvo miedo que el movimiento de la militancia de abajo” retara a los de siempre.
Indicó que en las encuestas de reconocimiento que se hicieron públicas fueron mal elaboradas porque estaba en la pelea por los primeros tres lugares y los resultados arrojaron que entre los hombres quedó entre el lugar 11 o 12.
“Muchos que no han hecho campaña, los colocaron por encima en un hipotético empate técnico. En un 7.4 por ciento eran no simpatizantes, el 92 por ciento eran morenistas, serían entre el 25 y 30 por ciento de las encuestas levantadas. No completaron esos cuestionarios hubo una trampa, estaban nerviosos y decidieron que nosotros no participáramos, practicamente borraron nuestra existencia”.
Manifestó que seguirá el trayecto para consolidar la Cuarta Transformación y el pacto desde debajo de la militancia para vigilar al partido, porque consideró que lo que hubo fue la exclusión, la cual es “francamente cínico porque tenían miedo del movimiento y que las bases retaran a las burocracias de siempre”.
Señaló que se pusieron de acuerdo y adujo que se observó una presunta operación de Mario Delgado en los resultados, pero “es una especulación, no tengo certeza, esa característica de operar (de Delgado) no las podemos conocer, fueron las burocracias amenazadas de que hubiera una opción distinta”.
Gibrán Ramírez cuestionó que Porfirio Muñoz Ledo sacara 14 puntos en las encuestas, “algo muy raro”, que en este caso fuera determinante en qué punto de la lista colocaban los nombres, lo que muestra que hay evidencia de lo mal que estaba elaborada la encuesta.
“Mario sale alto, se puede explicar la inconsistencia, la encuesta fue mala, nadie la puede defender, que Porfirio salga tan alto y Mario bajo, es una evidencia de que no se gestionó bien, pues hay aleatoriedad por la forma en que se aplicó el ejercicio”, precisó.
Alertó que va a impugnar el proceso ya que hay muchos intereses en juego y hablará con la militancia, además de que seguirá participando en la Conferencia Interamericana de Seguridad Social y en la militancia de Morena.
Finalmente, enfatizó que en la encuesta no era de ganar a la primera, ni se trataba de trayectorias, pues todas las encuestas lo daban como una opción para dirigir a Morena y ahora resulta que estaban equivocadas las encuestadoras que contrató el INE.
Las encuestadoras encargadas de realizar este primer ejercicio fueron Parametría, Mendoza Blanco y Asociados, Nemotecnia 2.0, así como los investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México Patricia Romero y Carlos Rodríguez.
El levantamiento se realizó del 22 al 28 de septiembre, donde se realizaron 4 mil 677 entrevistas individuales de manera presencial en las viviendas, cuyos resultados se registraron en dispositivos móviles.