HOY LAS MALAS LENGUAS NOS CHISMEARON QUE…
QUE los partidos políticos trabajan a "todo vapor" en sus respectivas campañas por la alcaldía, así como diputaciones locales y federales.
QUE pese a los esfuerzos y el dinero que "inyectan" a sus actividades a través de la entrega de apoyos, playeras, gorras y otros souvenirs -en algunos casos-, no han servido de mucho a ciertos personajes que simplemente "no levantan" entre el electorado.
ESTE es precisamente el caso de la candidata del PRI a diputada federal por el II Distrito, Lucelly Alpizar Carrillo, cuya campaña prácticamente ha pasado desapercibida entre la población de Progreso y los otros 38 municipios incluidos en esa demarcación federal.
Al menos en municipios como Progreso, según comentan los priistas de esta puerto, la candidata Alpizar se la ha pasado de "colgate" de la candidata a la alcaldía (Jessica Saiden) y de la candidata a diputada local (María Ester Alonzo).
Unos priistas dicen ignorar lo que está pasando, al menos eso dicen, aunque otros indican que esto se debe a que Alpizar no tiene recursos económicos para impulsar su propia campaña.
"Lo cierto es que se la pasa aprovechando casi todos los eventos de sus correligionarias locales, pues se "cuelga" con frecuencia de las actividades de Jessica Saiden y María Ester", se comenta.
A más de un mes de que iniciaron las campañas, las actividades de Lucelly simplemente no levantaron en el ánimo de la gente. Incluso por ahí hay quejas del priismo de que la candidata no ha realizado las actividades necesarias en los municipios que le corresponden, pues solo asiste con frecuencia a las comunidades más grandes.
Entre los priistas dicen que a Lucelly le quedó muy grande la designación y que a duras penas podrá cubrir el puesto que dejará vacante la actual diputada progreseña María del Carmen Ordaz Martínez.
Hay quienes dicen que el triunfo "está garantizado". Claro, es posible que así sea pues a final de cuentas la votación en los municipios respaldará la elección en el II distrito federal.
Para otros, Lucelly nunca levantará, pues durante el llamado "cerverato" tuvo un pobre desempeño, participando en protestas y agresiones encabezadas por el entonces "viejo PRI".
Hoy Lucelly realiza campaña "colgada" de otros candidatos y sonríe como la persona más humilde que pudiera existir, aunque de forma inevitable no muchos le creen, pues su propia historia la está juzgando. Apenas el año pasado, en una reunión del mismo PRI y siendo ella delegada del tricolor en Progreso, Lucelly fue abucheada por las lideres.
Peor aún, en Progreso y otros municipios de la zona, hay numerosos electores que afirman no saber quién es la candidata del PRI, pues en varias seccionales nisiquiera la conocen… peor tantito.
***IMPORTANTE. ESTOS SON CHISMES QUE NOS CONTARON HOY LAS MALAS LENGUAS. PUEDE QUE SE CONFIRMEN O NO EN LOS PRÓXIMOS DÍAS.