Avanza estrategia de prevención y control de dicha enfermedad en la entidad.
MÉRIDA.– Yucatán avanza con pasos firmes hacia el control de la tuberculosis, mediante la búsqueda intencionada de casos en grupos vulnerables, que se extiende hacia albergues, cárceles y personas con comorbilidades, y brindando capacitación en la red de Tratamiento Acortado Estrictamente Supervisado (TAES) al personal de salud.
En el marco del Día Mundial de la Lucha contra esa enfermedad, el responsable de dicho programa en el estado, René Armando Rodríguez Suárez, subrayó que la indicación del Gobernador Mauricio Vila Dosal y el titular de la Secretaría de Salud (SSY), Mauricio Sauri Vivas, es realizar todas las tareas necesarias, de prevención, atención y acceso de pacientes a un tratamiento integral.
Conmemoramos esta efeméride siguiendo la enseñanza del lema “Continuemos este 2022, trabajando unidos para poner fin a la tuberculosis”, detalló el funcionario, y expuso que la tendencia en la entidad, en los últimos años, es a la disminución de la prevalencia de este mal, que va de una tasa de 13.2 casos por cada 100 mil 000 habitantes a 10.4, según el reporte del 2021.
Señaló que, ese año, el éxito de curación se elevó hasta 87 por cierto; se cuenta con apoyo del Comité Estatal de Farmacorresistencia (Coefar), que supervisa y recomienda tratamientos, con el fin de cortar la cadena de transmisión, y se dispone de medicamentos que facilitan el cumplimiento de la persona afectada, disminuyen la posibilidad de efectos secundarios y favorecen la curación.
Explicó que la tuberculosis sigue siendo un problema de salud pública y afecta el bienestar de la población alrededor del mundo; en 2020, se reportó 5.8 millones de contagios a nivel global. Asia concentra el 43 por ciento, mientras que el continente americano, sólo tres, y en México, se ha logrado importantes avances, gracias a diversas estrategias.
Un ejemplo es que, en 1994, se lanzó TAES, de gran eficacia y bajo costo, que permite detectar y curar, con base en diagnóstico de laboratorio y tratamiento gratuito, con observación directa de la toma de medicamentos. La dedicación y el esfuerzo del personal de salud, con trato humano y respeto a los derechos de la ciudadanía, han permitido que este esquema sea un éxito.
Luego de que, el 24 de marzo de 1882, Robert Koch anunció el descubrimiento de este bacilo –el paso más importante hasta ese momento, para el control y la eliminación de esta enfermedad mortal–, en 1982, un siglo después, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Unión Internacional contra la Tuberculosis y las Enfermedades Respiratorias (Uicter) realizaron el primer Día Mundial.
Mediante esta jornada, se busca educar al público sobre las devastadoras consecuencias económicas y de salud causadas por la tuberculosis, así como su efecto para los países en desarrollo y su impacto continuo en el orbe.
Actualmente, se afronta nuevos retos, como la creciente asociación de esta con otras afecciones, como diabetes mellitus, VIH, alcoholismo, desnutrición y resistencia a fármacos anti TB de primera línea, junto con la necesidad de reducir el estigma social que implica y el alto valor de reintegrarse a la sociedad o a la familia después de su curación.
Finalmente, Rodríguez Suárez expuso que se continúa fortaleciendo acciones con la Federación y otras instituciones del ramo, tanto públicas como privadas, además del asesoramiento de las y los pacientes, para llevar un proceso personalizado y supervisado, con el menor riesgo posible de abandono.