

PROGRESO.– A poco más de un año de que las calles 46 y 25 fueron convertidas en vía de acceso temporal para los camiones de carga pesada que suben a la terminal remota de Progreso -a raíz de los trabajos de construcción del viaducto elevado de la calle 82-, vecinos, comerciantes y transeúntes de esas arterias están manifestando su preocupación debido a que se desconoce hasta cuándo continuará el paso de los tractocamiones en esas vías residenciales.
Las obras del viaducto elevado están atrasadas, no hay fecha de inauguración oficial y mucho menos información por parte de las autoridades hacia los ciudadanos.
Los vecinos se encuentran preocupados debido desde hace varias semanas se realizan trabajos en la calle 46 y 25 -según se dijo-, para la colocación de semáforos, lo que ha acrecentado los rumores de que esas calles se quedarán, de forma permanente, como vía alterna de acceso para los tractocamiones que no quieran utilizar el nuevo viaducto elevado, el cual será de cuota y cobrará alrededor de 1 dólar por tonelada de carga a los transportistas, lo cual es considerado una tarifa excesiva.

El nuevo viaducto, como publicamos, es una vía concesionada que será operada por las empresas que tuvieron a su cargo la construcción, las cuales está lideradas por la Constructora ICA. La concesión, que apenas el año pasado pasó de 30 a 40 años de duración, aparece a favor de la empresa Operaciones Autovía Libramiento Progreso S.A. de C.V.
La obra del nuevo viaducto, también generó varias protestas de vecinos de la calle 82, que incluso interpusieron recursos legales y amparos contra la obra, pero finalmente el gobierno federal, en coordinación con el estatal y el municipal, ejecutaron el proyecto.
(#ENCONTEXTO: Comienza operativo vial para el paso de tráileres sobre la calle 46 y 25: cambios durarán de cinco a seis meses)
(#ENCONTEXTO: Amplían a 40 años la concesión para la operación y administración del Viaducto Elevado de Progreso)
Los vecinos de las calles 46 y 25 han reiterado que el constante tráfico de pipas, tráileres y dobles remolques es perjudicial, ocasionando contaminación, ruido, daños estructurales a predios y hasta daños a instalaciones eléctricas, de telefonía e internet y tuberías de agua potable que constantemente registran fugas.
Además, según señalan, desde hace un año padecen problemas con la presencia de estas unidades cuyos choferes transitan con exceso de velocidad y hasta se estacionan a las puertas de los predios, tapando las entradas, así como provocando accidentes viales en la zona.
Esto, según señalan, sin contar con que precisamente en la calle 46 por 27 funciona una escuela primaria, lo cual es un riesgo latente de accidentes, cosa que parece no importarle a los choferes de estas unidades de carga pesada ni a las autoridades.
UN AÑO DE LOS CAMBIOS VIALES…
Como se sabe, la calle 46 era de doble sentido, pero en sesión de Cabildo, los regidores del Ayuntamiento de Progreso de la pasada administración 2021-2024 aprobaron modificar la vialidad de la calle 46 a un solo sentido (de Sur a Norte) y autorizaron el paso de unidades de carga pesada sobre esas calles como ruta de entrada a la terminal remota a cargo de la Asipona Progreso.
En aquel entonces, el alcalde en funciones Roger Gómez Ortegón, informó que los cambios eran temporales, que durarían entre cinco y seis meses, aproximadamente hasta octubre de 2024, en lo que se terminaban los trabajos del nuevo viaducto elevado.
Éste cambio de vialidades entró en vigor el viernes 5 de abril de 2024.
Actualmente, los vecinos de la zona viven con la incertidumbre de qué sucederá, pues no hay información oficial, considerando que si las calles se quedan como vía alterna para el paso de unidades pesadas, los problemas continuarán, vivirán en medio del peligro y sus predios se devaluarán al quedar entrampados en una arteria de tráfico de carga pesada. (ProgresoHoy.com)


