CIUDAD DE MÉXICO.– La PGR in formó ayer de la detención de dos mujeres “por su probable responsabilidad en la comisión de delitos relacionados con el caso de las empresas fantasma en Veracruz, en el que está involucrado el ex gobernador con licencia Javier Duarte.
La dos mujeres, quienes contaban con órdenes de aprehensión emitidas por un juez federal, están acusadas de participar en operaciones con recursos de procedencia ilícita y en actividades de delincuencia organizada, señaló un comunicado de la institución.
Se presume que las detenidas participaron en las operaciones de empresas ligadas con lavado de dinero proveniente de las arcas públicas de Veracruz, dijeron a EFE fuentes de la PGR.
Medios de Veracruz especulan que se trata de la esposa y la madre de Duarte.
Más tarde se difundió que un juez federal obsequió la orden de aprehensión solicitada por la PGR contra el gobernador con licencia.
La PGR atrajo dos carpetas de investigación iniciadas por la Fiscalía de Veracruz contra el gobernador. Pese a que la orden ya fue obsequiada por el juez, el gobernador no puede ser aprehendido porque aún goza del beneficio del fuero constitucional, el cual finaliza el último día de noviembre.
Por su parte, el gobernador interino de Veracruz, Flavino Ríos, dijo ayer que desconoce el paradero de Duarte, quien la semana pasada dejó la gubernatura para afrontar las acusaciones.
En declaraciones a “Radio Fórmula”, Ríos dijo no tener información sobre el paradero de Duarte, con quien tuvo el último contacto la madrugada del jueves pasado, y aseguró que es completamente falso que haya facilitado su huida.
Negó haber dado autorización para que el político escapara del estado y señaló que las bitácoras de los vuelos de las aeronaves del gobierno estaban a disposición de las autoridades competentes para que lleve al cabo una investigación.
Además, dijo no tener información sobre una supuesta orden de aprehensión emitida contra el ex gobernador de Veracruz (2010-2016), investigado por la Fiscalía general por enriquecimiento ilícito, peculado e incumplimiento del deber legal, y destacó que no mete las manos al fuego por nadie.
Duarte abandonó el gobierno estatal el 12 de octubre, 48 días antes del fin de su mandato, para hacer frente a acusaciones de corrupción en su contra, que calificó de infamias, y ese mismo día el Congreso nombró como gobernador interino a Ríos.
El gobernador electo de Veracruz, Miguel Ángel Yunes, del PAN, acusó hace meses a Duarte de tener, utilizando nombres de familiares y conocidos, 25 propiedades en México y fuera del país, con un valor que supera los 3,000 millones de pesos (159 millones de dólares).
Por su parte, el presidente nacional del PAN, Ricardo Anaya, dijo que el PRI apoya el proceso contra el político porque sólo sanciona lo que es indefendible.
“Sólo sancionan a quien ya no necesitan. En el PRI no se ejercieron acciones antes contra Duarte porque eran elecciones y necesitaban su ayuda”, comentó en una entrevista con Luis Cárdenas, en “Noticias MVS”.
Anaya comentó que los integrantes del PRI no actúan contra otros gobernadores señalados por actos ilegales porque aún tienen utilidad para el partido: “No hacen nada porque en realidad no les interesa la justicia; lo que están haciendo es venganza”, puntualizó.