Conectate con nosotros
22 de Marzo de 2025

Noticias

El caso Fincantieri: un fracaso para la economía de Yucatán

Publicado

el

Como un revés para la economía dé Yucatán es considerado el hecho de que la firma italiana Fincantieri no continúe su proyecto de inversión en Puerto Progreso.

En declaraciones a medios locales, el maestro en Economía y Administración Álvaro Cano Escalante señaló que la cancelación de ese proyecto supone un atraso en el desarrollo del estado y en su potencial económico.

El maestro Cano aseguró que Yucatán ha estado por debajo de sus posibilidades en décadas.

“Todo proyecto que implique ampliar infraestructura y generar nuevos servicios que finalmente ya no se lleve a cabo no es una buena noticia para la economía local”, afirma el especialista.
Fincantieri construiría el astillero más grande de América Latina en Progreso.

A pesar de que la inversión planeada era significativa, el economista señala que en el pasado se han cancelado proyectos de mayor impacto, como las zonas especiales económicas que nunca se llevaron al cabo.

En el caso de la cancelación de la firma Fincantieri, el analista financiero considera que es posible subsanar la pérdida explorando otras alternativas de financiamiento o buscando nuevos inversionistas para impulsar al puerto.

Además, sostiene la posibilidad de retomar el proyecto, pues a pesar del anuncio de la cancelación, no está completamente descartado. “El lenguaje ha sido de cancelación, pero yo diría que siempre está abierta la puerta a que la misma empresa italiana lo retome o que el gobierno estatal negocie con el federal para generar las condiciones que los italianos requieren”.

Sobre cuáles serían las alternativas tras la cancelación de la firma italiana, el maestro Cano Escalante plantea, saliéndose del tema del puerto de altura, la promoción de la industria tecnológica y de software en Yucatán.

“Tenemos mano de obra capacitada, universidades con carreras relacionadas y la inversión en este sector no es demasiado costosa”, explica. Según el economista, la región podría seguir el ejemplo de países como India, que ha pasado de ser un centro maquilador de software a un productor de tecnología propia.

El especialista señala que el gobierno estatal debería analizar seriamente esa alternativa, ya que permitiría atraer inversión extranjera sin requerir concesiones a largo plazo ni grandes desembolsos de presupuesto estatal.

Además, este modelo encadenaría a las universidades y a los jóvenes profesionales con oportunidades laborales de alto valor.

El economista también destaca la importancia de la inversión extranjera en el desarrollo económico de cualquier región, aunque enfatiza que debe verse como una oportunidad temporal que permita la transferencia de tecnología y conocimiento a la mano de obra local.
“En todos los países asiáticos que han logrado un crecimiento económico significativo, incluyendo China, la inversión extranjera fue el punto de partida”, señala.
Respecto a si la cancelación de la inversión de Fincantieri representa un retroceso en la política económica de Yucatán, el entrevistado considera que si el proyecto era una de las apuestas principales del gobierno, su cancelación debe considerarse un fracaso.

Cree que existen alternativas viables para atraer inversión en el sector naval, como buscar el interés de corporaciones asiáticas, que actualmente dominan la industria.
“Aunque la empresa italiana es una de las más importantes o la más importante de Europa, está todavía lejos de los grandes corporativos navales asiáticos: los coreanos, los japoneses y los chinos son los que lideran. Si hubiera un interés de que esto avance, pues hay que cabildear, hay que irse a platicar y a negociar con esos otros posibles inversionistas”.
Otra posibilidad que menciona es el financiamiento del proyecto mediante una combinación de recursos públicos y privados, o incluso a través de instrumentos financieros de largo plazo., similar a lo que se planteó para el cancelado aeropuerto de Texcoco.
“Dado el sesgo ideológico presente en la actualidad, dudo que esta opción sea considerada por el gobierno estatal”.
Además, agrega, sería reconocer que lo que se hizo con el NAIM, en realidad, sí era una buena idea, y por eso creo poco factible que lo consideren las mentes del gobierno del estado”.
En definitiva, la cancelación del proyecto de Fincantieri representa un desafío para Yucatán, pero también una oportunidad para replantear su estrategia de desarrollo económico y explorar nuevos sectores que permitan un crecimiento sostenido y sostenible, indica.

Este texto fue editado por el equipo de redacción de ProgresoHoy.com. Colabora con nosotros enviando reportes, quejas ciudadanas, o noticias a nuestras redes sociales, escribe a nuestro correo [email protected], o envía mensaje, fotos o vídeos a nuestro WhatsApp al número 9991-501547.

Publicidad
¡Déjanos tus comentarios!

¡DÉJANOS TUS COMENTARIOS!


Publicidad

Suscríbete a nuestro boletín

Suscríbete a nuestro boletín de noticias y recibe notificaciones cuando publiquemos nuevos artículos de forma gratuita.

Gracias por suscribirse.

Algo salió mal.

Publicidad

Facebook

#LOMASLEIDO