MÉXICO.– La ex gobernadora de Yucatán y hoy diputada federal del PRI, Ivonne Ortega Pacheco, se destapó y aceptó que sí quiere ser la candidata presidencial del tricolor para la elección federal de 2018.
En entrevista con el periódico EL UNIVERSAL, Ortega Pacheco aseguró que no hay político en México que no sea su máximo sueño ser Presidente de la República; y ella se describe como una “competidora” y una “corredora” nata.
Desde su oficina en la Comisión de Comunicaciones y Transportes de la Cámara de Diputados, la priísta yucateca dijo que tiene muy claro que la política es de tiempos y momentos; actualmente es diputada federal y presidenta de este órgano legislativo, por lo que su tarea inmediata es entregar buenos resultados en el Palacio Legislativo de San Lázaro, así como aportar en la implementación de la reforma de telecomunicaciones.
De buen humor y entusiasmada porque en la más reciente encuesta de EL UNIVERSAL aparece como aspirante presidencial, la priísta reconoció que es un honor que la gente le diga en la calle que “no se vaya a bajar a la mitad del camino, porque representa a las mujeres”, pero asegura que si no es ella, se sumará a quien resulte candidato.
¿Cómo se encuentra el escenario político nacional? —Tenemos una crisis de credibilidad en los partidos y en la política.
Entramos a una condición que da la posibilidad de candidaturas independientes, hoy ya hay varios registrados a diferentes cargos desde candidaturas independientes que son una expresión de la sociedad.
A partir del año 2000, cuando se pierde la Presidencia de la República por parte de mi partido, luego se consolida la democracia y llega la alternancia, cada proceso electoral es de alta competitividad y no hay carros completos o elecciones sencillas.
Ese es el escenario en el que estamos entrando en 2016. ¿Pronóstico del Partido Revolucionario Institucional para este 2016?
—Lo ideal sería ganar todas, pero ya no hay épocas de carros completos. Entonces yo diría que nos podemos mantener, por lo menos esa sería la meta mínima o el piso, de las 12 que se están compitiendo hay nueve que gobernamos y hay que mantenerlas, no quiere decir que sean las mismas.
Hacia las elecciones en 2018, ¿cómo ve el escenario?
—Veo un escenario complejo, la propia crisis económica mundial lastima el bolsillo de los mexicanos, aunque el gobierno ha hecho bien su esfuerzo en el recorte presupuestal sacrificando muchos de los temas, menos los programas sociales. Va a ser muy competida la elección, por primera vez se va a tener la condición de candidato independiente en la Presidencia de la República, ya hay quienes han levantado la mano en esa condición, hay a quienes le han preguntado y dicen que no, pero está la candidatura independiente y llegó para quedarse.
En las encuestas de EL UNIVERSAL la sociedad la menciona como aspirante o precandidata a la Presidencia de la República.
¿A usted le interesa?
—Por supuesto, no hay político, de cualquiera de los partidos, que esté en la política y que su máximo sueño no sea ser Presidente de la República, pero también tengo muy claros los momentos y los tiempos. Hoy soy diputada federal, tengo que trabajar por la comisión que presido, que es de Comunicaciones, tengo que entregar buenos resultados y si esas condiciones le pueden interpretar a mi partido y a la gente que puedo ser candidata del PRI y Presidenta de México, por su puesto. He competido nueve veces en 10 años, fui presidenta municipal, diputada local, diputada federal, senadora, gobernadora, siempre en la competencia al interior de mi partido, soy competidora, soy corredora, me gusta correr la carrera, pero ahorita estoy concentrada en lo que tiene que ser, que es entregar buenos resultados en lo que hoy tengo, que es lo que te puede dar tu mejor carta de presentación.
¿Qué le dice que la gente ya la ubique como aspirante presidencial?
—Para mí es un altísimo honor, una niña que nace en un pueblo pobre, que es de una familia pobre, que no tiene la oportunidad de ir a la escuela, que ha tenido que estudiar su carrera, la secundaria y la preparatoria, ahorita en una maestría en línea, y estar contemplada en esa lista, de entrada, es un altísimo honor, pero también un altísimo compromiso de tener muy bien los pies sobre la tierra, de tener claridad de lo que es más importante, de lo que piensa y siente la gente. No sólo en la encuesta, sino que en la calle la gente te diga, particularmente las mujeres me ha tocado que me comenten: “No se vaya a bajar a la mitad del camino”, “usted representa a nuestras mujeres” o cosas así, gente que no conozco y que no sé de dónde viene, me ha tocado en la calle, aquí en la propia Cámara y eso para mí me compromete a seguir esforzándome a que esta condición que ellos ven se pueda fortalecer, o a final de cuentas, cuando el partido defina cuál será el método o la convocatoria, ya serán otros momentos, hoy es el momento de trabajar.
Hay varios que se mencionan en su partido, pero usted es la mujer más visible dentro del PRI.
—Afortunadamente, una de las mayores virtudes del PRI es que tiene muchos cuadros. Siempre en las candidaturas a las gubernaturas el PRI siempre trae siete, ocho o 10 candidatos y de esos hay cuatro o tres que tienen verdaderas posibilidades, entonces el trabajo de cabildeo y negociación entre los propios candidatos es un poco complejo. Qué bueno que tengamos a muchos aspirantes, pues eso significa que todo lo que nosotros podamos aportar lo haremos cuando el PRI decida la convocatoria y quién será el candidato. Mi abuelo me decía: “Tú tienes que trabajar por lo que tienes, no por lo que quieres, porque si trabajas por lo que quieres, descuidas lo que tienes y no llegas a lo que quieres”. Hoy tengo la diputación federal, la Comisión de Comunicaciones, que es un reto importante para la consolidación de la reforma de telecomunicaciones, tengo que trabajar por eso y si eso da para poder levantar la mano, obviamente la levantaré en su momento.
Si no está bien posicionada en las encuestas en el momento en el que haya que decidir la candidatura del PRI, ¿usted le dejaría el paso a otras personas?
—Creo que lo más importante es tener al que sea el mejor perfil para la competencia y que represente, que lo que nos costó mucho recuperar —12 años—, la Presidencia de la República, no se pierda en los primeros seis, creo y entiendo que mis compañeros de partido tendrán la madurez suficiente al momento de buscar el perfil que la sociedad espera. Si lo soy, seguramente convocaré a todos ellos; si no lo soy me sumaré a la figura que el país necesite en ese momento.
¿Ve una elección competida por la gran baraja de aspirantes?
—Seguramente, todos son cuadros muy calificados. Algunos jóvenes, en los que me incluyo, otros con más experiencia, pero todos con la condición de poder ser, cuadros que el partido reconoce y seguramente la militancia estará viendo y que esa es una de las virtudes que tiene el PRI, la capacidad de ponernos de acuerdo al momento de que se toma la decisión.
¿Qué plantea para no fracturarse al elegir candidato en 2018?
—Mi abuelo decía: “El que respira aspira y el que no, expira”. Yo creo que todos tenemos derecho a aspirar, todos tenemos derecho a trabajar en esta aspiración, pero cuando llegue su momento, cuando tengamos la convocatoria y tengamos definido el perfil que requerirá el partido en ese momento, todos tendremos que trabajar en torno a esa figura que sea el ideal para la competencia en 2018.
¿Quién considera que será el enemigo a vencer en 2018?
—Hoy no veo a nadie con claridad, obviamente hay muchos que ya abiertamente han manifestado su aspiración. Creo que es muy temprano para decir quién podría ser.
¿Cómo ve a Andrés Manuel López Obrador?
—Lleva dos procesos electorales en los que ha participado, lleva 12 años, y con este ya serían 18 en campaña, es claro que tiene un target de aceptación. Es una candidatura y una campaña anticipada, pero eso no me corresponde a mí juzgarlo, sino a los tribunales.
A Margarita Zavala, ¿cómo la ve?
—Hay un acto de solidaridad de género, es lamentable que no haya podido llegar a la Cámara de Diputados un cuadro como lo es Margarita Zavala, coincidimos en la diputación federal la primera vez que fui legisladora, la veo como una mujer aplicada a sus cosas, solidaria en su momento con las decisiones que tomó su esposo en el gobierno, creo que eso le ha generado alguna condición, y no son platos que ella rompe, pero al final también hay que pagarlos. Es una mujer con talento y es bueno que haya más mujeres que levantan la mano, ojalá y hubiera otras en las izquierdas que quisieran levantar la mano para la competencia.
¿Se ve en la boleta con Zavala?
—Estaría interesante, no sólo una mujer participando en la elección, sino los principales partidos de México encabezando las boletas mujeres, creo que cambiaría la política, porque las mujeres le apostamos un poco más al respeto, a no meternos al tema personal y a no tener las campañas sucias que hemos visto en los últimos tiempos.