PROGRESO.– Dirigentes pesqueros tienen sospecha fundada de que en la pesca furtiva de especies en veda, robos en la costa y asaltos a mano armada en alta mar hay una banda organizada en la que presuntamente están involucrados marinas turísticas y talleres de reparación de motores fuera de borda.
También consideran que las acciones contra esos actos delictivos
deben realizarse en la costa y las carreteras, con revisión de talleres y
marinas turísticas.
José Luis Carrillo Galaz, presidente de la Federación Regional de
Cooperativas Pesqueras del Centro y Poniente de Yucatán, y Julio
Alvarado Méndez, presidente de Esfuerzos Pesqueros con base en el muelle
de La Caleta de este puerto, indican que la principal acción a tomarse
es la vigilancia en los puertos de abrigo, en especial en el de
Yucalpetén.
Según señalan, se sabe por parte de los pescadores asaltados que los
encapuchados navegan en un lanchón de 29 pies de eslora con potente
motor marino de más de 115 caballos de fuerza.
Además, llevan una grúa móvil para levantar y robar los motores de
las lanchas, entonces hay que investigar para dar con esa embarcación
porque en algún lugar debe estar.
El dirigente indica que las autoridades navales y policíacas podrían
llevar a cabo un operativo de revisión en las marinas turísticas, pues
en algunas se podría encontrar algo relacionado con los asaltos y la
pesca furtiva, pues también tienen talleres donde dan mantenimiento a
los motores fuera de borda.
Carrillo Galaz considera que se deben catear los talleres de reparación de motores fuera de borda, que los dueños comprueben con documentación la procedencia de esos equipos marinos.
El entrevistado señala que en la costa se puede encontrar mucho
relacionado con las acciones delictivas que afectan al sector pesquero,
por eso señala que las autoridades podrían emprender un operativo en las
playas, puertos de abrigo, talleres y marinas turísticas.
De las lanchas ribereñas, continuó, la mayoría usa motores fuera de
borda de 75 caballos de fuerza, pero si realizan el operativo y se
encuentran motores de 115 ó 200 caballos de fuerza, se podría investigar
para que lo usan y los dueños demuestren la actividad que realizan y
dónde compraron esos motores.
En la ciudad y carreteras hay cámaras de vídeo vigilancia que son una
buena medida y se debería monitorear todo lo que circula, en especial
vehículos que transportan lanchas, motores y productos pesqueros.
El mar es muy amplio, comenta Carrillo Galaz, es difícil que se
detecte a los asaltantes durante las noches, pero podría haber
patrullajes en la zona de pesca con las embarcaciones de la Armada de
México. Durante el día, la misma Armada de México con la Conapesca
podrían inspeccionar las lanchas y barcos que están pescando en alta
mar.
“Hay muchas lanchas que no están matriculadas y operan, así como
embarcaciones con matrícula que no están trabajando; se podrá detectar
que hay lanchones que no tienen nombre ni matrícula, pero podrían ser
usadas para los asaltos”, explicó Carrillo Galaz.