Pues resulta que no todo ha sido “miel sobre hojuelas” tras la llegada del panista Erik Rihani al Ayuntamiento de Progreso, pues tras asumir el poder con todas las prisas luego de que el TRIFE confirmara una cardíaca decisión y le diera el triunfo electoral, el alcalde ahora se enfrenta a numerosos problemas que le heredó su predecesor Julián Zacarías Curi.
Algunos, según ha trascendido, son líos que ya estaban previstos y otros no tanto, pues dicen los rumores que el ex edil panista le dejó a “Riha” varios “muertitos” guardados en el armario de la presidencia municipal que involucran a diversas dependencias, proveedores y temas sindicales y administrativos.
Esto ha generado que el alcalde Erik Rihani se haya dedicado a “apagar fuegos” en diversas áreas de la administración municipal donde los problemas estaban “prendidos con alfileres” y se pusieron al descubierto en el minuto 1 de la nueva administración municipal.
Ya resultaba sospechoso, dicen los comentarios en la Comuna, que sus predecesores les hayan dejado un Ayuntamiento “eficiente y funcionando al 100%”, cosa que según señalan varios enterados del caso, no fue real.
Estos líos, que les detallaremos en una próxima entrega, ocasionaron atrasos en el funcionamiento de varias áreas municipales e incluso en la designación de funcionarios, así como en la distribución de comisiones en el Cabildo de Progreso, pues el presidente municipal le dio prioridad a la atención y resolución de esos problemas.
A un mes de haber asumido el cargo, Rihani se acomoda poco a poco en la silla municipal y va aplicando sus estrategias y programas, imprimiendo su propio estilo de gobernar que seguramente en breve arrojarán los primeros resultados.
LA DESIGNACIÓN DE COMISIONES MUNICIPALES OCASIONA LÍOS EN LA BANCADA DE MORENA…
Como marca la Ley, el Ayuntamiento de Progreso asignó las comisiones para cada uno de los regidores del Cabildo.
Esto, según se supo, ha generado líos al interior de la bancada morenista por el reparto de las comisiones entre los regidores, en especial entre los ediles de la 4T.
Como informamos, de los cuatro ediles de Morena en Progreso, la regidora Addy Catalina Estrella Pinto fue designada como regidora comisionada de Educación y el regidor Román García Martínez, fue comisionado en Pesca y Fomento Agropecuario.
Los otros dos, José Elías Cruz Cámara, fue comisionado a la Unidad de Reclutamiento y Bolsa de Trabajo, y la regidora Pamela del Socorro Pech Pisté, estará comisionada en Atención a la Diversidad.
La designación de la maestra Addy no es cosa de la casualidad, por su amplia trayectoria docente, lo mismo que en el caso de Román García, quien cuenta con extensa experiencia en el sector pesquero y formación en diversas áreas profesionales.
Sin embargo, al interior de la bancada morenista hay enojo porque las comisiones más importantes no le tocaron a Elías Cruz, gente afín a la diputada local “Chelita” Magadán y quien recientemente fue nombrado por el Partido Morena Yucatán como “coordinador de la bancada de Morena en el Cabildo de Progreso”. Entre los morenistas de Progreso se comenta que se esperaba que el “coordinador” de la bancada recibiera comisiones más relevantes que le permitieran operar políticamente en Progreso, pero no fue así. Lo mismo ocurrió con Pamela Pech, afín a Esaú Velázquez, quien se hará cargo de temas de la diversidad.
Como se sabe, el morenista Román García, gente afín al grupo del ex candidato de Morena, el Dr. Raúl Alvarado, ha “pintado su raya” de sus compañeros morenistas, pues incluso ha aprobado varias propuestas y designaciones en el Cabildo, a diferencia de sus compañeros que han votado en contra en la mayoría de las votaciones del Cabildo Municipal.
Recientemente, en entrevista, el morenista también se desmarcó de la “Chelita”, pues advirtió públicamente que él no será títere de nadie, en clara alusión a la legisladora local quien según se sabe, insiste en controlar remotamente desde el Congreso del Estado a los otros tres regidores de Morena. Esto le ha acarreado al regidor numerosos problemas internos, pero según aseguró, las campañas ya termibnaron y él llegó al Ayuntamiento a trabajar y no a grillar.
RUN RUN…
Y hablando de “muertitos” en el armario, resulta que ya hay fuertes rumores de que el ex abanderado morenista habría recibido un jugoso “apoyo” del alcalde saliente tras haber sido declarado “alcalde electo” de Progreso. Según rumores, el apoyo lo habría recibido para presuntamente taparle las espaldas al edil panista saliente.
Según los chismes, los tratos incluyeron hasta la ratificación de funcionarios panistas en la fallida administración guinda, que como todos sabemos, no llegó al poder debido al fallo del TRIFE.
A raíz de esos acuerdos, según trascendió, el Ayuntamiento panista saliente aceleró el proceso de entrega recepción y el entonces alcalde interino, Roger Gómez recibió al ex candidato de Morena en las oficinas de Presidencia, según dijeron “como parte del proceso de entrega-recepción”, lo cual generó críticas entre los propios panistas de Progreso, debido a que se había interpuesto un recurso de impugnación y todavía no había una sentencia oficial o resolución en firme que confirmara el triunfo morenista.
Se habla incluso que como parte del acuerdo quedarían como “asesores” ó serían ratificados en el Ayuntamiento morenista los titulares de cuatro direcciones claves: obras públicas, catastro y zona federal, agua potable y tesorería. Casualmente, en tres de esas direcciones Rihani no ratificó a los directores y el tesorero que sí fue ratificado, renunció misteriosamente días después “por motivos personales”.