MÉXICO.– Un grupo de científicos del Instituto Politécnico Nacional (IPN) logró el microencapsulamiento de la insulina para administrarse por vía oral, a la cual agregaron varios recubrimientos para hacerla resistente a los ácidos gástricos.
Los especialistas usaron diversas técnicas específicas para el aislamiento microscópico de la hormona, la cual se espera que en el largo plazo se pueda administrar por vía oral, indicó en un comunicado el Politécnico.
Los científicos realizan en la actualidad experimentos en ratones diabéticos para determinar el nivel de absorción, además de probar el adecuado control de la glucosa en la sangre.
Los politécnicos ubicaron la insulina en glóbulos de aceite, después combinaron dos técnicas de microencapsulación por medio de emulsiones dobles y coacervación compleja.
A su vez, protegieron a la insulina con una capa de proteína; además de un poisa con propiedades mucoadhesivas para mejorar su permeabilidad en el intestino.
Los experimentos, que se realizaron vía in vitro, arrojaron que el método para resguardar la insulina es confiable, pues se conserva intacta y su actividad es satisfactoria.
El proyecto lo realizaron los investigadores de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB) Guillermo Ismael Osorio Revilla y Tzayhri Gallardo Velázquez, el cual podría ser una alternativa para las personas diabéticas que se inyectan a diario la insulina.
El grupo de investigación lo completa el doctor en ciencias Fernando Cárdenas Bailón, el cual sentó las bases para contar, en un futuro, con un tratamiento eficaz que no lastime la piel de los pacientes.
Especialistas de distintas partes del mundo estudian mecanismos en la actualidad para lograr la administración oral de la insulina, pero resulta difícil porque los ácidos digestivos la desintegran y llega una mínima proporción a la sangre; además se trata de un péptido grande que obstaculiza su absorción en el intestino.
La siguiente etapa del proyecto será llevarlo a la fase clínica en personas con diabetes tipo I, los cuales no producen insulina y con tipo II en etapas avanzadas, para valorar sus efectos.
La metodología empleada en este experimento también se podrá adaptar para administrarse con otro tipo de péptidos terapéuticos que requieran llegar intactos al intestino para su absorción, mencionaron los investigadores.